PLANETA HABITABLE CERCANO

 

PLANETA HABITABLE CERCANO

            Hace ya unos años se anunció que se había descubierto un planeta “habitable” a una cierta distancia próxima a la Tierra. Las condiciones son que está a una distancia similar a su sol a la que nosotros estamos del nuestro, que ambos soles son similares y también lo son los tamaños de los planetas. Recientemente ha vuelto a saltar la noticia de tal descubrimiento, añadiendo una frase que viene a decir, algo así, que está relativamente cerca, en concreto a 4,23 años-luz, lo que dicho de esa manera tal parece que está ahí, a tiro de piedra como quien dice.

            Primero vamos a los datos para poder hacer los cálculos de cuanto de cerca está el susodicho planeta y cuanto tardaríamos en llegar a él con las posibilidades de velocidad espacial actuales. Teniendo en cuenta que la velocidad de la luz son 300.000 km/s (kilómetros cada segundo), 4,23 años-luz son, aproximadamente, 4x10¹³ km, 40 billones de kilómetros o, si lo preferís, 40.000.000.000.000 km.

            La nave espacial que ha viajado más rápido hasta hoy es la sonda Parker de la NASA que está girando alrededor del sol a casi 600.000 km/h. No es una velocidad normal para un viaje espacial. La velocidad máxima alcanzada por una nave tripulada en los viajes a la Luna no llegó a los 50.000 km/h.

            Ya tenemos los datos básicos. Ahora basta dividir. ¿Cuánto tardaría la sonda Parker en llegar a ese planeta habitable “próximo”? Pues nada menos que unos 7.600 años. Si fuésemos en una nave como las que van a la Luna tardaríamos unos 91.000 años. Pues nada, que próximo, lo que se dice próximo para nosotros no parece que lo está tanto. Pero si hay que dar noticias para distraernos de la bastante despreciable realidad en la que el mundo vive, pues nada, nos ilusionan con que hay un planeta habitable y “cercano” al que podríamos ir.

            Hala, ya podéis ir haciendo las reservas de billetes para colonizar, si es que no está ya ocupado, ese planeta habitable “próximo”. Yo os espero aquí y ya me contáis a la vuelta. Ay estas noticias así, sin espulgar.